Las rocas más representativas de la Península Ibérica se encuentran expuestas en el jardín del museo.

La corteza terrestre está formada por materiales sólidos, pero debajo de ella se encuentra el manto, compuesto de un magma de rocas fundidas. Este magma se solidifica cuando sale o se aproxima a la superficie, cristalizando en rocas como el granito o el basalto.

Otro tipo de rocas, como la caliza y la arenisca, se denominan rocas sedimentarias porque se forman por acumulación de sedimentos, fragmentos de rocas y restos de seres vivos depositados en el fondo de lagos o mares. Finalmente están las rocas metamórficas, como la pizarra o el mármol, que se originan cuando las rocas cristalinas o sedimentarias son enterradas, aplastadas y transformadas por los movimientos de la corteza terrestre. La mayor parte de las piedras y rocas que encontramos en la naturaleza tienen un aspecto rugoso porque están sometidas a la acción del viento, la lluvia, las heladas y otros procesos de meteorización. Otras, como los cantos rodados, tienen esta forma porque fueron pulidas y redondeadas por la acción del agua en ríos o mares, y tienen un aspecto muy parecido a las que los humanos utilizamos para decoración. Estas diferencias de aspecto se pueden observar en las rocas del jardín, que presentan una superficie pulida mecánicamente.
Inicio > Jardín de rocas
Actividad recomendada para:

 Todos los públicos
Contactar

Para ver horarios y otras informaciones ir a Información y servicios de CosmoCaixa.