El software espía o spyware son aplicaciones maliciosas o engañosas que se instalan de forma inadvertida junto con otros programas que descarga el usuario. Dichos tipos de programas pueden ejecutar varias acciones diferentes: existen los que se dedican a recopilar información del sistema en el que están instalados para después enviarla a través de internet.

Otros se dedican a mostrar continuamente publicidad no deseada o a modificar las páginas visualizadas o no existentes en el original. Todas estas acciones se enmascaran detrás de autorizaciones confusas, por lo que el usuario no suele ser consciente de ello.

Otro de los defectos de los spyware más intrusivos es que pueden cambiar nuestra página de inicio por otra, elegida por el programa espía, que tanto puede ser una página en blanco como una de contenido dudoso. Si se intenta restaurar la página de inicio desde las opciones del explorador, se comprobará que no es posible. Los cambios que el espía ha realizado en los registros del sistema no lo permiten. Para evitar los inconvenientes producidos por este tipo de programas espía, se recomienda utilizar programas antiespía. Dichos programas funcionan de un modo parecido a los programas antivirus, pero analizan el sistema a la búsqueda de programas espía y los eliminan. No son incompatibles con los programas antivirus, sino complementarios. Si tenemos los dos instalados en el ordenador estaremos más bien protegidos contra posibles intrusiones en nuestro sistema.