Cuando pagamos un recibo desde nuestra cuenta y no hay saldo suficiente se genera un descubierto o, lo que es lo mismo, nos quedamos en números rojos.
Los motivos por los que nos quedamos en descubierto suelen ir ligados a una mala previsión en cuanto a los pagos a los que debemos hacer frente, un gasto imprevisto, un retraso en el cobro de la nómina u otro ingreso, o una mala situación económica.
¿Cuánto cuesta un descubierto?
Que el banco nos adelante el dinero para hacer frente a un recibo puede sacarnos de un apuro, pero ese descubierto que se generará en nuestra cuenta tiene costes. Los podemos dividir en tres conceptos:
- Los intereses de demora, que se calcularán teniendo en cuenta el saldo deudor y los días que estemos en números rojos.
- La comisión por descubierto, que se calcula sobre el saldo deudor más alto que se haya producido y suele ser de alrededor del 4 % de dicho importe. Los intereses de demora y la comisión de descubierto no pueden superar 2,5 veces el coste del tipo legal del dinero y se pagan en la liquidación periódica de la cuenta.
- La comisión por reclamación de descubierto. En este caso es un coste fijo que normalmente está entre 15 € y 45 €, dependiendo de la entidad, y que se justifica por las gestiones que hace la entidad para pedir al cliente que ponga la cuenta en positivo. Se cobra a partir de entre el tercer y séptimo día.
¿Cómo puedo evitar quedarme en descubierto?
Ahora que ya conocemos qué es un descubierto y qué gastos puede generar, podemos seguir algunas recomendaciones para evitar encontrarnos en esa situación:
- Planifica tus ingresos y tus gastos teniendo en cuenta la periodicidad de los recibos, sobre todo los seguros anuales, que llegan cuando menos los esperamos. Seguir los gastos nos permitirá no solo conocer el estado de nuestra cuenta, sino también ver en qué gastamos el dinero y poder tomar decisiones conscientemente. Algunos bancos incluso nos ofrecen la posibilidad de ver una previsión de nuestros gastos futuros.
- Intenta mantener siempre un saldo mínimo en la cuenta que evite que se quede en descubierto.
- Controla el saldo de la cuenta a través de la banca on-line para hacer seguimiento de tus cuentas, sobre todo los últimos días de mes.
- En el caso de que tu banco tenga el servicio, activa los avisos SMS para saber cuándo se producen movimientos.
- Si tienes cuentas inactivas, cancélalas para evitar gastos que ocasionen descubiertos.
- Siempre puedes pedir a tu banco que no te deje en descubierto, pero valora bien esta opción, pues devolver un recibo nos puede acarrear otros problemas.
Recuerda
Evita quedarte en números rojos y en el caso de que eso ocurra ingresa el dinero lo antes posible para reducir los costes del descubierto. Si tienes otras cuentas es recomendable que hagas un traspaso.
En resumen, un descubierto en cuenta es una forma de endeudarnos que puede sacarnos de un apuro, pero cuyo coste suele ser más elevado que otros tipos de financiación.
Y si eres cliente de CaixaBank, puedes utilizar Mis Finanzas para tener en todo momento una previsión de tus próximos recibos.